No todo el Fanfic se basara en el anime y manga algunos escenarios los creare/inventare yo y agregaré personajes de mas

-ℰ𝓈𝒶 𝒸𝑜𝓃𝒹𝑒𝓈𝒶

"𝒩𝒾𝓃𝑔𝓊𝓃𝒶 𝒷𝓊𝑒𝓃𝒶 𝒶𝒸𝒸𝒾𝑜𝓃 𝓆𝓊𝑒𝒹𝒶 𝓈𝒾𝓃 𝒸𝒶𝓈𝓉𝒾𝑔𝑜"

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Sebastian nos había dicho que el conde Damian ya venia en camino a la mansión, asi que fui a mi habitación con Benedict a cambiarme a algo mas decente.

—Señorita  _____, su madrastra le envía vestidos.

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—deberá escoger uno, ya que al parecer el invitado es importante deberá verse presentable.

—este.

—Bien la bañera ya está preparada.

Después de bañarme, me vestí y me peine

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—Bien Joven ama, debemos ir con el Conde.

—si.

Bajamos las escaleras hasta llegar a la oficina de ciel, toque la puerta y accedí con un "Pase", vi que ya estaba arreglado para recibir al Conde Damian.

Ciel me dijo que debía fingir una personalidad frente al invitado.

—¿Disculpa?

Me empezó a explicar que tipo de personalidad quería que tuviera, no estaba del todo de acuerdo pero no tenía opción. O quizás si y no lo sabía.

—Si, ¿Me vas a ayudar?

—Está bien lo intentaré...

—Bien.

—Supongo que tú tendrás tu misma actitud.

—Exactamente, y estas bien vestida para la ocasión.

—Supongo..:

—No supongas. Si sientes algo raro recuerda agarrame del hombro discretamente, también necesito que le saques información; familia y pasatiempos. Ya me entenderás ¿Entendido?

—si.

—Al parecer ya llego el conde Damian.

—Supongo que esperaremos aquí.— en la mesa había un juego.

—Si.

—¿por que un juego de mesa?

—lo verás pronto.— La sonrisa de Ciel me dio un ligero escalofrío.

Escuchamos como los pasos se acercaban más... hasta que llegó el conde Damian.

—Bienvenido Conde Damian, es un honor tenerlo aquí.

—Gracias a usted Conde phantomhive, por dejarme quedarme en su mansión.—volteó a verme con una sonrisa un tanto aterradora.—¿Quien es esta linda chica?

—Ella es mi prometida, la condesa lovett.

—¡Bienvenido conde Damian!—me sentia

—Gracias por su hospitalidad.

—Bien Cariño, tengo papeles que traer.—la incomodidad que sentí me hizo sentir náuseas.

—si te espero aquí.

—¿No tardará, verdad?

—No Conde , será rápido.

—Por favor ve rápido.

—claro.

Salí de la habitación lo más rápido que pude. Me sentí un poco aliviada hace mucho que no trataba a las personas tan dulce, se me hizo raro hablarle de ese modo a Ciel.

Me dirigí a mi habitación a buscar los papeles.

Y me quedé unos segundos pensando en lo que me dijo antes.

FlashBlack

—Si sientes algo raro recuerda agarrame del hombro discretamente,también necesito que le saques información,familia, pasatiempos ya me entenderás ¿Entendido?

—si

Fin del Flashback

—A que se refiere con algo raro... Mejor voy a la oficina de vuelta.

Baje intentando verme "Normal" ya que la puerta de la oficina de ciel estaba abierta.

—Perdón por la tardanza.

—No se preocupe.

—Ciel aquí están los documentos que me pediste.

—Esta bien.

—¿Dígame Conde Damian usted tiene familia?

—¿De donde la pregunta señorita ____?

—Curiosidad.

—La curiosidad mato al gato señorita.

-lo sé conde Damian.

—Para responder su pregunta, No no tengo familia señorita ____

—vaya ,pensé que si tenía familia conde.

—No señorita, no tengo familia.

—¿Tiene pasa tiempos?

—No señorita ___.

—Oh esta bien.

—¿Para que necesita esa información?

—Ah pues... solo para conocer a nuestro invitado.—le di una sonrisa

El rostro de aquel tipo lo reconocí unos minutos después. Hace algunos años máximo 5 o 6 años. Damian manejaba una de las fábricas de mis padres, por supuesto no era una empresa muy importante como las demás, después de un año nos enteramos de que aquel hombre había vendido la empresa y quería un dinero extra, el cual mi padre no accedió, él hombre lo extorsiono diciendo que me tenía y me asesinaría, en esos momentos yo estaba llegando de mis clases de ballet, escuchando la plática. Así que decidí abrazar a mi padre dando a entender que yo estaba ahí sana y salva.

Flashback

—Disculpe ¿A quien tiene?—la voz de mi padre se escuchaba desde su oficina.

—Mi niña vamos a tu habitación.—Mi niñera me tomó de la mano

—Voy a ver a papá .

—Disculpe me está extorsionado  ¿Con mi hija?

Ese día escuché la llamada y a mi padre un poco alterado pero no lo demostraba.

—papá.

En ese momento ví como se tranquilizó y termino de responder a la llamada.

—Sabe algo, no le daré 500,000 dólares, adiós.

Fin del flashback.

Después de un rato empezamos a jugar el juego de mesa, pasaron 1 o 2 horas hasta que llego sebastian, avisando que ya íbamos a cenar.

—Bocchan, señorita ____. La cena se servirá en unos minutos.

—Si sebastian.

—Gracias sebastian.

—Bien dejaremos el juego para después ¿esta bien Conde damian, Ciel?

—Si.

—No creo que haga falt-

—No me gusta dejar las cosas a la mitad.—Ciel interrumpió a Damian.

—Chiquillos...

Ciel lo fulminó con la mirada

—L-Los chiquillos les encanta jugar...

—Bien Ciel, conde damian bajemos al comedor.

Cenamos al aire libre , hacia buena noche, una brisa bastante fresca, solo que sentía la mirada del conde Damián en mi ... era ¿Incómodo?.

—Señorita ____, su apellidó se me es familiar.

—¿Disculpe?

—¿A dónde quiere llegar conde?

—A nada, solo que, su rostro, apellido y sus ojos se me es conocido... ¿De casualidad su padre es el Conde Lovett?

—Eso ya es personal Conde.

Terminamos de cenar, y el Conde Damian nos dijo que iba a hacer una llamada, nosotros nos dirijamos a la oficina de ciel.

—Bocchan,señorita ____ les traigo el té.

—gracias.

—Sebastian, ¿sabes donde está Benedict?

—Esta resolviendo unos asuntos señorita, usted esté tranquila.

—El té no es de mi agrado. Sebastian, ¿que es esto?

—Es té italiano, en Italia tienen la costumbre de tomar café. Así que, en Londres es muy difícil conseguir té de buena calidad... ¿No es de su gusto?

—No..

—¿señorita es de su gusto el té?

—No...

Pasaron varios minutos y no sabíamos nada del conde Damian, pero por la sonrisa maliciosa de ciel algo había echo, y no era algo bueno, pude observar a Benedict pasar.

—Benedict.

—¿Si, señorita?

—Quiero que hagas algo, acércate.

—si.

Le empecé a susurrar lo que tenía que hacer.

—hazlo rápido, ¿entendido?

-𝒴𝑒𝓈, 𝓂𝓎 𝒜𝓃𝑔𝑒𝓁

Benedict no tardo tanto y me dijo lo que había investigado.

Sentía como sonreía inconscientemente con cada palabra que me decía Benedict.

—bien gracias benedict... puedes encargarte del asunto con Sebastián.

—Por supuesto.

Benedict salió de la habitación, y volví quedarme sola con Ciel.

—___ que le pediste a tu mayordomo.

—Que resolviera un "asunto" nada de que preocuparse.

Vi como ciel se paró de su silla y se dirigió a mi, el cual me provocaba escalofrío.

—___... a mi no me puedes engañar.

—¿Qué te hace pensar que te engaño?—acerqué más mi rostro a el de él, mientras jugaba con el moño de su traje.— ¿A qué punto quieres llegar, Ciel?

—A nada...—sus mejillas eran ligeramente rojas. Se alejó y carraspeó la garganta.

Terminamos el té y apagamos la luz por un momento, estaba todo tranquilo hasta que escuchamos un grito bastante fuerte de un hombre.

Sabia de quien era, lo cual provocó que soltara una ligera risa, al igual que ciel.

—Parece un cerdo siendo degollado—habló ciel.

—Ciel me iré a recostar, mañana tengo que ir a mis clases de ballet.

—Ah, sí. esta bien.

—Buena noche.—Me levanté de la silla y caminé a la salida.

—Buena noche.

Me fui a mi habitación tranquila sabiendo que el conde damian no estaba ya...

Me recosté en la cama y caí en un sueño profundo. Me desperté rápidamente ya que sentí como alguien me cargaba, abrí mis ojos un poco al ver a una persona enmascarada. Reaccioné rápido, empujando al hombre haciendo que cayera al suelo junto aquella persona. Me pare rápidamente pero todo fue una pérdida de tiempo, la persona me agarro del pie haciendo que me tropezara, sabia dónde golpear, pero la fuerza de la persona era tan grande que no podía, sus brazos me sostenían con mucha fuerza, si hacia más resistencia más fuerza aplicaba. Acudí a la segunda opción.

—¡Suéltame!—Fue gritar. No funcionó ya que puso una de sus manos en mi boca, lo mordí y grito bastante fuerte. Provocando que me soltara, aproveché que me soltó e Intente salir de la habitación... pero fui muy lenta ya que me había puesto un pedazo de tela con algo...provocando que me cayera al suelo.

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Empecé a despertar y pude visualizar un salón. sabía que no era de la mansión Phantomhive. En ese mismo lugar pude escuchar a mis espaldas dos hombres hablando, intente pararme sin que se den cuenta pero estaba atada.

Aquellos tipos hablaban de mis ojos. tenía algo atado mi boca, el cual no me permitía hablar o gritar.

—¡Sus ojos son muy valiosos!

—¡Lo sé Idiota!, ¡pero de que me sirve que no tenga ojos!

—¿Para qué la necesitas?

—¿Para qué ?, ¡¿Como que para qué?!, ¡para un extorsión pedazo de Idiota!

—¿S-Sobornó?, ¡Sabes quienes son!

—¡¡Claro que lo sé!!

—¡¡Si lo supieras para que secuestraste a la hija del Conde Lovett!!

—¡¡Porque ese maldito me debe algo!!

Al oír que mi padre debía algo me sorprendí, mi padre no era el tipo que debía algo...

empecé a moverme con cuidado para quitarme las cuerdas de mis manos, hasta que empezó la sospecha.

—¡¡Cuanto tiempo va a estar esta mocosa dormida!!

—¿Seguro que no pusiste demás?

—¡S-Si!

—Azarru el problema no es cuanto le pusieron de adormecente, si no que no sabemos si esta muerta o no.

—¿A que te refieres?—se escuchaba exaltado.

Uno de los tipos se empezó a acercar, se escuchaba que tenía un bastón, el cual con ese bastón que traía empezó a señalarme.

—El problema es que no sabemos si esta muerta por su piel pálida.

Sentía que me estaba asfixiando al no respirar.

Escuche como salían de la habitación, así que aproveché para respirar y desatar más la mordaza que traía, escuche pasos acercándose, volviendo a estar como estaba, pero haciendo que estaba ya despierta.

—Buenos días, princesa— dijo quitándome la mordaza que tenia en la boca.

—Soy _____. No princesa

—Vaya... amaneciste de malas hermosa—agarrando mi mejilla.

Pude ver a ciel,seguía inconsciente. Le grite a Azurro para así despertar a Ciel.

—¡¿QUE LE HICISTE A CIEL?!

—Nada.

—¿Que quieres de mi y de ciel?

—Así que quieres ir al punto...Bien, esta aquí por casi lo mismo, del mocoso. Quiero su fortuna y de ti...

Sentí como su brazo bajaba hasta mi hombro provocando incomodidad y un escalofrío, lo empuje con mis pies.

—¡ALÉJATE DE MI!

—¡¡Y de ti quiero el dinero de tu padre!!... Ya veré que hago contigo.

—¡¡¡Eres un bastardo!!!

Vi como se acercaba rápidamente... después me empezó a golpear hasta que se cansó...yo empeze a sangrar tanto de la boca como de la nariz, tenia raspones y algunos moretones.

—Creo que me excedí.

Azurro salió de la habitación yo con mi poca fuerza me quite las cuerdas sin deshacer la atadura para luego volver a ponérmelas en caso de que volviera.

—¿Ciel?

No recibí una respuesta.

—Ciel por favor despierta...— empecé a moverlo con cuidado.

—¿____?—su voz era débil.

Asentí con la cabeza ya que tenia la voz quebradiza del dolor que tenia y mis ojos cristalizados.

—¿___ qu-?

Ciel se levanto como pudo, estaba exaltado.

Pudo visualizarme con mi blusón ensangrentado,  y yo con unos pequeños rasguños, sangre escurriendo de mi boca y nariz, y unos moretones.

Escuche como alguien se acercaba asi que volví a ponerme las cuerdas y quedarme donde estaba.

-¡Wow!, quien diría que el conde Phantomhive despertara tan rápido.

—¡¿Que carajo le hiciste?!

Azurro me agarro del cabello atrayéndome hasta él.

—¿Yo?, yo no le hice nada.

—E-Eres un bastardo.

Azurro me empujo a la pared haciendo que cayera. Solté un ligero gritó.

Notaba el enojo de ciel.

—Conde phantomhive, seamos amigos.

—Yo nunca seria amigo de una rata.

Azurro pensaba golpear a ciel como no tenia los pies atados aproveche de correr y recibir el golpe yo.

—¡____!

—Estoy bien ...— empecé a tartamudear.

—¿Como te desataste los pies?, que nena tan interesante...

Después de un rato Azurro se acerco a Ciel preguntándole sobre una llave, el cual Ciel exclamó que sus sirvientes tenían la llave y si no volvía de la iban a entregar a la policía.

—Bien niño, veo que no lo haremos a las buenas.

Azurro me agarro del cuello.

—la mocosa morirá al igual que tus sirvientes.

Ciel empezó reír, su plan no funcionaría. Solté un suspiro y con dificultad hablé.

—Benedict estoy aquí.

Sentí como Azurro presionaba mi cuello.

—bien, entonces la mocosa morirá.

—Yo no haría eso.

—¿eh?

—¿Podría soltar a mi ama?—Benedict estaba detrás de Azurro.

—¿que?

—Bocchan esta bien.

—tardaste mucho Idiota.

—Señorita quien le hizo eso.

Benedict me ayudo a pararme, ya que me costaba bastante.

—¿Quien crees?

— ¿Caballero usted le hizo eso a nuestros jóvenes?

—¿Que son ustedes?

—Unos simples mayordomos.

—¡Les pagare el doble, no el triple, obtendrán todo lo que desean, mujeres, carros, dinero!

—No nos interesa el dinero. —dijeron ambos mientras que sebastian desataba a Ciel.

—Entonces morirán ambos.—azurro sacó una arma y me apunto.

—¿Q-Qué?

—No podrá hacer nada.

—Después de todo no nos interesa las cosas humanas.—hablaron ambos mayordomos, terminando de romper los brazos de Azurro Vanel.

Yo me desmaye y no supe que paso, lo ultimo que escuche fue a Ciel.

—¡____!—sentí como alguien me sostenía.

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Me puse a ver habitación y vi que no era mi habitación , al ver a mi lado derecho vi a ciel dormido. Me levanté rápidamente al ver que Ciel y yo estábamos en su cama.